Alrededor de 2.000 personas entre niños, mujeres y hombres han sido trasladados a otras estaciones de inmigración desde una ciudad fronteriza de Texas que se ha visto desconcertada debido a la gran afluencia de haitianos, venezolanos y nicaragüenses, según el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Dichos traslados seguirán sucediendo «para garantizar que los migrantes irregulares sean detenidos, procesados ??y sacados rápidamente de Estados Unidos de conformidad con nuestras leyes y políticas», dijo el DHS en un comunicado.
Según el Departamento de Seguridad Nacional en las próximas 72 horas se busca acelerar los vuelos a Haití y otros destinos, con el fin de dar respuesta a los migrantes que se refugian a la espera de ser procesados en condiciones cada vez más precarias bajo el Puente Internacional del Rio que conecta la ciudad de Texas con Ciudad Acuña en México.
Michael Vargas, inmigrante venezolano comenta sobre su situación en la frontera: «Hay orina, heces y estamos durmiendo junto a la basura en el campamento, llevamos 3 días junto con mi esposa y mis dos hijos.” Además, afirma Vargas, que su número de boleto es el 16.000 y las autoridades están procesado el número 9.800.
La orden que ha permitido que la mayoría de migrantes sean expulsados rápidamente sin posibilidad de solicitar asilo, ha sido la conocida Título 42, una orden de salud pública de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, emitida bajo la administración Trump al comienzo de la pandemia de coronavirus. El mandatario Joe Biden ha mantenido dicha regla en vigor, aunque eximió a los menores no acompañados y a la mayoría de las familias.
Un juez dictaminó el jueves que la política no se podía ejercer a las familias, empero que el fallo no entra en vigencia a lo largo de 2 semanas y la gestión Biden lo está apelando en la corte.
La noticia ha sido creada a partir de REUTERS: https://reut.rs/3zz7wqe
