Desde septiembre del 2021 se vienen discutiendo la política de prioridades de deportación del gobierno Biden, las cuales, están enfocadas en deportar a todo inmigrante que tenga récord criminal y NO cualquier inmigrante que hayan ingresado por la frontera sin representar un peligro para la sociedad.
Sin embargo, la Corte Suprema revisará una demanda de Texas y Louisiana para detener esta política a finales del próximo mes. De acuerdo con Texas y Louisiana las prioridades de deportación de Biden son inconstitucionales y no siguen los procesos legales habituales según las leyes americanas.
De momento la política de Biden está bloqueada por el El Tribunal de Apelaciones, lo que quiere decir que cualquier inmigrante que haya ingresado ilegal y no tenga papeles podría ser detenido y deportado.
Los democratas consideran que los oficiales de Servicio de Ciudadanía e inmigración deberían evaluar la situación integral de un inmigrante y no solamente detenerlo por no tener papeles, sino considerar su historial criminal y tomar una decisión frente al caso.
Lo que se espera de todo este tire y afloje, es que luego de estas elecciones de medio turno que se llevarán a cabo este mes de noviembre, se puedan alinear los partidos políticos en pro de una reforma migratoria que contribuya a resolver esta crisis.
Mejor dicho, se espera que a final de año se tengan los argumentos de ambas partes y que los magistrados del Tribunal Supremo decidan si van a continuar o no con esta guía migratoria.
Noticias redactada a partir de: Univisión y San Diego Union Tribune.